jueves, 20 de noviembre de 2008

tv series. Dexter. Lo que todos sabíais... pero yo no.


Hará un par de años que alguien me pasó la intro de Dexter... y me fascinó al momento. Sabía que, con semejante opening, y con Michael C. Hall de protagonista, sólo podía caer rendido a los pies de esta serie... tarde o temprano. Pues bien, ha resultado ser bastante tarde. Y es que esto es lo que pasa cuando tienes un código moral estúpido (y ordenado) que te obliga a ver las series a medida que van saliendo en DVD en este país. Es por eso que todavía no he visto la cuarta temporada de Lost... y, por extensión, no he visto hasta ahora la primera de Dexter. Tampoco es que me arrepienta. Lo único malo de este regimen de visionado es que ahora que puedo comentar sobre el tema, resulta que todo el mundo ya ha comentado y no puedo decir nada nuevo.

Total... Que, tal y como pensaba, he acabado siendo fan de Dexter. Pero no tanto como imaginaba (eso sí, ya me han soplado que el fanatismo seguramente me llegue con la segunda temporada... ¡siempre tarde!). No he podido evitar acabar con cierta sensación de bluff, básicamente por un motivo: los cinco primeros capítulos son impecables, pero después la trama parece diluirse para, en los dos últimos episodios, apresurarla con sutiles palmaditas en el culo. Lo que podrían haber explicado de forma mucho más extensa (a lo largo en el tiempo, sí, pero también hacia abajo, escarbando), haciendo que la fascinación calara hondo en el espectador, lo resuelven a trancas y barrancas, de forma que al final piensa "ah! muy bien la conclusión" (y que conste que es una de las resoluciones más apañadas del panorama de series actual)... pero ya está. Podría haber sido mejor. Igual que se podrían haber aprovechado algunas relaciones que, finalmente, quedan desperdiciadas (y me refiero básicamente a ese psicólogo asesino,con quien Dexter podría haber establecido un lazo más que seductor). Pero que nadie crea que estoy despotricando contra la serie: me ha alucinado el ritmo, las actuaciones (deeply in love con la hermana del prota... ñam!), el cuidado empaque visual (esos blancos quemados son oníricos, casi surrealistas) y, sobre todo, la deliciosa trampa moral que supone posicionarte al lado de un asesino, desear que se salve y se salga con la suya. Pero no puedo esperar para meterme mucho más profundamente en esa salvaje dicotomía ética que supone la forma de vida de Dexter: espero que la segunda temporada vaya precisamente de eso... Por lo demás, un último fallo de la serie: los títulos de crédito finales deberían ir acompañados de Bonnie 'Prince' Billy cantando "I'm a wolf among wolves"... Perdonadme. Tenía que decirlo.

1 comentario:

Cap dijo...

Tío, me acabas de reventar un post, has dicho exactamente todo lo que yo tenía en la cabeza. Totalmente de acuerdo contigo.